viernes, 11 de julio de 2008

Política y Familia

.....La propuesta política que nos están mostrando los gobernantes y los aspirantes a gobernantes, no va por buen camino. En los contenidos expuestos en los planes e ideas de gobierno no nos muestran el valor fundamental de una sociedad, han dejado atrás las raíces que nos conectan con la herencia de lo que nos identifica, con las tradiciones y con las costumbres. En estos días de discursos políticos, casi nadie habla o se refiere a la constitución de nuestra identidad como pueblo, como nación, como patria. Del comportamiento humano propio y social en una sociedad democrática, libre y justa.
.....En primer lugar debemos desempolvar el concepto o la idea de nuestra patria, la cual es la dimensión cultural de nuestra identidad. La patria se puede complementar y perseguir en ella un fin común, lo que los antiguos romanos llamaron «popules», pueblo. Otra identidad es el Estado, que depende del lugar desde donde se mire puede ser el más fuerte, en lo superficial, o el más débil en lo profundo. El concepto de patria es sumamente ampliable, una persona puede irse a otro lugar y decir que se siente en su segunda patria, aunque indudablemente lo que lleva por dentro de donde nació es imposible quitárselo, sea bueno o sea malo.
.....El pensamiento Aristotélico, nos señala al individuo como un ser social por naturaleza, “el hombre es un animal político”. La casa es sinónimo de familia, la familia es donde nace y se desarrolla el ser, la aldea es un grupo de determinadas familias, la ciudad es el conjunto de aldeas y la polis el conjunto final de unión entre todos estos elementos. Sin embargo no se trata sólo de establecer un esquema de organización social, es importante el nivel de relaciones que se establecen entre ellos y los consiguientes medios que se utilizan para obtener determinados fines. Hemos evolucionado desde ese modelo social y nuestro comportamiento societario así lo describe.
.....La familia es la primera forma de plenitud social, es el lugar de mayor intensidad social relevante, toda la economía depende de ella. La educación y la intimidad son funciones esenciales de ésta y naturalmente no se encuentran fuera de ella. Estas dos funciones son fundamentales para la formación de un individuo con humanidad, un ser humano y social, además son dos ejercicios que no se encuentran en la polis o son proporcionados por el Estado.
.....Pero en estos tiempos se nos ha mostrado como en otros conceptos sociales, como se le van quitando funciones trascendentales que son indiscutiblemente pertenecientes a la familia. Esto nos ha sido mostrado por quienes ejercen el poder a través del Estado, de ciertas instituciones, de los medios de comunicación o por la abertura que vamos dejando con nuestra falta de conocimiento, desinterés o defensa a ultranza de otros intereses por encima de la sociedad familiar. Es aquí donde señalo entonces que esta disertación está destinada a quienes desean invitar a los miembros de esta nación a pertenecer a un orden social compuesto de valores humanos.
.....La economía nos la imponen desde fuera de la interioridad familiar, la educación se la hemos dejado al Estado, pagamos por una mejor educación en los mejores colegios y escuelas, fuera de la casa. Con esto nos aseguramos de tener quien nos cuide cuando estemos viejos. Vamos dejándole a la familia funciones residuales como esta. Ni siquiera estos residuos se eximen de ciertas sustituciones, la profundidad íntima reclama intensificación, y aquella persona que piensa que sabe de mucho, se ahoga en esta orientación y como resultado de esta falta de intimidad, se obtiene una gran tristeza social.
.....En esta actual sociedad, nuestros niños sufren de una particular enfermedad, la falta de concentración, y cuando apenas pueden concentrarse, lo hacen frente a las pantallas de los televisores o de las computadoras, medios excelentes que al ser mal utilizados diseca el entendimiento y el aprendizaje. En ciertos casos esta situación expone ante el niño la curiosidad, pero no crea la necesidad. He ahí un ejemplo como se sustituye una situación que es necesaria para una buena educación y como factor de crecimiento.
.....Si a un hijo se le da todo se le mal educa, no se le está enseñando el sentido de la necesidad, clara señal de una baja educación. Este proceso no es aislado de la sociedad, pero se encuentra insustituiblemente dentro de la familia, en un fijo y claro ambiente de intimidad, así la familia es la que nos da la identidad, nos da la socialización y la personalización, el ser humano como persona. No se puede desarrollar el sentido humano con la ausencia de esta.
.....El cuerpo y alma de la familia es la economía. En la familia se da la primera división del trabajo, que es un rango esencial en la economía, se hace según el modelo que cada quien ejecuta para los otros, una sociedad de servicios mutuos, cuyo resultado final es de todos, aunque en la actualidad no son unidades propias de producción. Por ello es importante que la familia sea el espíritu de la economía, el ser humano aprende a agradecer compartiendo.
.....La educación es el crecimiento interior a través del diálogo y éste se da en un lugar con confianza, es por ello que la familia es el primer lugar central de la confianza y de permanente educación. No hay sociedad que avance sin una buena comunicación. Contrariamente a lo pensado, los hijos no aprenden más de lo que sus propios padres aprenden de la crianza de ellos mismos. Otros conceptos trascendentes con el concepto de la sociedad que están presente en la familia son la civilización que se entiende como una referencia espacial, la historia como una referencia temporal, la cultura que se refiere a lo objetivo y la propia educación como lo subjetivo.
.....Una familia en confianza, es poseedora de una gran libertad. Aquello que se considera como propio y en lo que se tiene confianza, es el lugar de la seguridad, de modo que en la casa, podemos encontrar la extraordinaria relación entre libertad, confianza y seguridad como base de la felicidad. La felicidad consiste en estar alegre y tener paz interior. Hay personas que por carácter son alegres pero interiormente no tienen paz, al no completar ambos estados, no son felices. El fin último de la política es la felicidad, y la vida en sociedad debe procurar entonces su búsqueda.
.....Una persona que no se relaciona con casi nadie socialmente, es una persona sin características ni cualidades, llegar a este estado de individualismo hace perder al ser de toda razón humana. Se hace necesario entonces establecer que en sociedad debemos construir nuestro estado, y no dejar que el Estado se convierta en un sustituto de la familia. Por ello es necesario descubrir entonces qué viene dentro de las propuestas políticas de aquellos quienes aspiran a ser elegidos como nuestros gobernantes y por nuestra elección del tipo de comunidad que aspiramos: una nación identificada con sus raíces, tradiciones y costumbres o un colectivo individualizado centrado en los intereses particulares e individuales, sin un objetivo final concreto y basado en las miserias egoístas y mezquinas.
.....El arte de vivir nos enseña a no desconectar la apariencia de la sociedad, por ello la familia es la casa de donde venimos y desde donde iremos creando y previendo nuestro futuro y nuestro sustento, el mundo moderno debe fijarse en ello y nosotros como pueblo consciente debemos pararnos a pensar en este asunto. Así quien quiera vendernos la idea que entre familia y política no existen vínculos, complementos y relaciones, no forma parte de lo social, de lo colectivo, de lo político ni de lo humano.